Las utilidades brutas; es decir, los beneficios que aportaba el negocio, más los gastos que continúen a pesar del daño asegurado, esto es: las pérdidas consecuenciales derivadas de un siniestro cubierto por la póliza del daño directo.
Las utilidades brutas; es decir, los beneficios que aportaba el negocio, más los gastos que continúen a pesar del daño asegurado, esto es: las pérdidas consecuenciales derivadas de un siniestro cubierto por la póliza del daño directo.